jueves, 17 de julio de 2014

Imagina...



Imagina que vives en un pequeño pueblo de Almería, y que unas 3 veces al día sirenas te alertan de que van a caer misiles en tu zona.
Imagina que son 15 los segundos que tienes para buscar un lugar seguro y refugiarte.
Imagina que estás de camino al trabajo, y que en esos 15 segundos tienes que parar el coche de forma segura, y meterte en el edificio o refugio más cercano si te da tiempo, y si no tirarte al suelo protegiéndote la cabeza con las manos.
Imagínate que en el asiento de atrás llevas un bebé. O imagínate que aparte también llevas otro hijo de 5 años.
Imagina que tu madre está en una silla de ruedas en una residencia de ancianos, y que la única forma de protegerla cuando suena una sirena es cerrar los ojos y rezar por ella.

Imagina además que tienes otro hijo de 18 años que está en el ejército, al igual que otro dos de tus sobrinos.
Imagina que ese goteo es constante y se repite durante años.
Imagina que ahora, en vez de 3 veces al día, son 7 las sirenas.
Imagina que le pides a tu gobierno que por favor haga algo y tu gobierno te pide que tengas paciencia.
Imagina que el número de sirenas se intensifica, y que en vez de 7, ahora son 15. 15 sirenas, 15 segundos para protegerte.
Imagina que esas sirenas también suenan por la noche, y empiezas a dormir vestido.
Imagina que le pides de nuevo a tu gobierno que haga algo, y te piden que tengas más paciencia.
Imagina que tienes una hermana que vive en Madrid, y te cuenta que allí también están empezando a lanzar misiles.
Imagina que tienes un primo que vive en Santiago de Compostela, y te cuentan que también allí empezando a lanzar misiles, en una ciudad santa.
Imagina que esos misiles tienen como objetivo dañarte a ti, a tu bebé, a tu hijo de 5 años, al de 18, a tu madre, a tu hermana, a tus sobrinos, a tu primo…
Imagina que por fin tu gobierno comienza a actuar contra aquellos que están lanzando esos misiles.
Imagina que en el otro lado también hay gente inocente como tú.
Imagina que su gobierno no les protege.
Imagina que sufres por esas víctimas, pero también sufres por tu bebé, tus hijos, tu madre, tu hermana, tus sobrinos, tu primo…
Imagina que esas sirenas se intensifican, y que en vez de 15, ahora pasan a ser 20. Y que además nunca sabes cuándo va a sonar la siguiente. 15 segundos para esconderte.
Imagina que llaman a tu hijo y a uno de tus sobrinos, y les dicen que tienen que irse a la frontera.
Imagina que tu hijo tiene 18 años, y tu sobrino 20.
Imagina que no sabes lo que va a pasar.
Imagina que la gente por la que te preocupas, en vez de 8, son 50.
Imagina que una de tus amigas acaba de dar a luz, y su bebé se encuentra en una unidad de neonatología que es refugio antibombas.
Imagina que en tu casa te educaron para la paz, y hay guerra.
Imagina que pese al esfuerzo que tu gobierno hace por causar el menor número de víctimas civiles posibles en el otro lado, la gente sigue cayendo.
Imagina que tú sigues sufriendo. Por ellos, por ti, por tus hijos, por tu madre, por el hijo de tu amiga..
Imagina que todo esto comienza a salir en los medios de comunicación de todo el mundo.
Imagina que las sirenas siguen sonando, no puedes trabajar, no puedes dormir, no sabes cómo consolar a tus niños, como reconfortar a tu madre y no sabes qué va a pasar con tu hijo y tu sobrino que están en la frontera.
Imagina que en los medios de comunicación solo hablan del sufrimiento del otro lado, que tú también sientes.
Imagina que esos mismos medios, callan tu dolor, el de tus hijos, el de tu madre, el de tus sobrinos, el de tu hermana, el de tu primo…
Imagina que esos medios ayudan a generar más odio.
Imagina que estás sufriendo.
Imagina que tienes una amiga que vive en Noruega, y que no te llama para ver cómo estás.
Imagina que cuando de casualidad se interesa por ti por otros motivos, se queda en shock de lo que le cuentas porque no se había enterado de que te están lanzando misiles.
Imagina que tienes otra amiga en Alemania, y que aunque ella sí sabe lo que está ocurriendo, no te escribe para ver cómo estáis tú, tu familia….porque vuestros puntos de vista en un tema tan complicado y que a ella en realidad no le afecta no coinciden.
Imagina que hay más sirenas, más misiles, más heridos, más muertos y más sufrimiento en ambos lados.
Imagina que en medio de las tinieblas, hay un halo de luz en forma de una posible tregua.
Imagina que te agarras a esa esperanza, aun a sabiendas de que solo te va a traer paz durante unos meses, y que esa esperanza se desvanece.
Imagina que sabes que esos misiles que te caen diariamente se esconden bajo colegios, mezquitas, hospitales, guarderías, túneles subterráneos…
Imagina que las sirenas siguen sonando. 15 segundos.
Imagina que el gobierno debe tomar una decisión, y si no quiere bombardear desde el aire esas mezquitas, hospitales, guarderías, colegios y túneles, debe entrar.
Imagina que son tu hijo y tus sobrinos los que entran.
Imagina que cuando te enteras e intentas llamar por teléfono para saber lo que está ocurriendo, ya nadie contesta al otro lado….

Imagina que, pese a todo esto, hay quien sigue confiando en la paz.
Imagina….


1 comentario:

  1. Imagino cómo se puede sufrir en ambas partes.Sé que solo se habla de una porque es donde se produce la masacre, en la otra se sufre porque se vive el día a día con inseguridad, con miedo , escondiéndose de los misiles y eso también es un tormento.Imagino también que puede haber otras soluciones , esta fórmula nunca dió resultado, llevan años con ella y no funciona, solo genera más odio, más rencor, más violencia. Ciudadanos civiles de ambos lados tendrán que pedir a sus gobiernos que resuelvan sus conflictos de una manera pacífica, que quieren vivir en paz, con seguridad, con libertad... espero que eso ocurra cuanto antes, Emmiña. Bsos y ánimo.!!!

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